Gerardo Arreola (Corresponsal)
La Jornada/14 de febrero de 2009
La Habana, 13 de febrero. El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles, dijo hoy que espera que la próxima legislatura en la Cámara de Diputados tenga la “gran sensibilidad” de asignar los recursos presupuestales que impidan el deterioro de las instituciones de educación superior ante la crisis económica.
Narro aludió a los legisladores que serán electos en julio próximo. “Yo espero que, como lo ha hecho la Cámara de Diputados en los últimos años, se mantenga la gran sensibilidad para entender que una de las responsabilidades fundamentales radica en no dejar que las instituciones públicas de educación superior se deterioren”.
El rector de la UNAM, quien realiza una visita de trabajo de dos días a Cuba, contestó preguntas de la prensa tras hablar sobre la educación y la salud en México, en el Aula Magna de la Universidad de La Habana.
Señaló que hay una necesidad estructural de que las instituciones públicas de educación superior en México dupliquen su matrícula en el corto plazo y, además, la crisis impulsará la demanda en ese sector, al producirse deserciones en las escuelas privadas, por lo cual “sería un gravísimo error histórico tener un retroceso en la cobertura”.
“Hay que consolidar lo que tenemos”, subrayó el rector de la UNAM, “y eso pasa de manera muy importante por los recursos presupuestales”.
Reconoció que la actual legislatura ha sido “muy solidaria” con la institución. “Este año a la UNAM le dieron 700 millones de pesos adicionales y al conjunto de las instituciones públicas de educación superior más de 5 mil millones de pesos. Yo espero que esa conducta se mantenga”.
Narro instó, como lo ha hecho en días recientes, a estudiar con seriedad los alcances de la situación económica en México. “Es una crisis también de valores y de agotamiento de un modelo que no da más, que hay que repensar, replantear y en donde todos tenemos qué decir y qué aportar”, señaló.
“De verdad creo que no es un asunto simplemente de estado de ánimo”, añadió el rector, al ratificar su posición en la polémica nacional. “Es un asunto de responsabilidad, objetividad y realismo. La crisis existe, es muy delicada y por supuesto que nadie quiere que vivamos una catástrofe, pero el asunto es grave”.
El rector de la Universidad de La Habana, Rubén Zardoya, entregó a Narro la medalla conmemorativa de los 280 años de la institución cubana, en reconocimiento al nivel académico, compromiso social, pluralidad de conocimientos y actitud crítica y constructiva de la UNAM.
Las dos casas de estudios “tienen una larguísima tradición de intercambio que, además, por fortuna no se ha interrumpido en los últimos años”, recordó el rector mexicano.
Señaló que más de cien académicos cubanos trabajan en la UNAM, donde además hay 52 estudiantes originarios de la isla. Unas dos docenas de investigadores o docentes mexicanos están en Cuba, bajo diversos planes de intercambio que favorecen las estancias cortas.
Narro asistió la víspera a la inauguración de la 18 Feria Internacional del Libro y visitó el local de la UNAM.
Narro aludió a los legisladores que serán electos en julio próximo. “Yo espero que, como lo ha hecho la Cámara de Diputados en los últimos años, se mantenga la gran sensibilidad para entender que una de las responsabilidades fundamentales radica en no dejar que las instituciones públicas de educación superior se deterioren”.
El rector de la UNAM, quien realiza una visita de trabajo de dos días a Cuba, contestó preguntas de la prensa tras hablar sobre la educación y la salud en México, en el Aula Magna de la Universidad de La Habana.
Señaló que hay una necesidad estructural de que las instituciones públicas de educación superior en México dupliquen su matrícula en el corto plazo y, además, la crisis impulsará la demanda en ese sector, al producirse deserciones en las escuelas privadas, por lo cual “sería un gravísimo error histórico tener un retroceso en la cobertura”.
“Hay que consolidar lo que tenemos”, subrayó el rector de la UNAM, “y eso pasa de manera muy importante por los recursos presupuestales”.
Reconoció que la actual legislatura ha sido “muy solidaria” con la institución. “Este año a la UNAM le dieron 700 millones de pesos adicionales y al conjunto de las instituciones públicas de educación superior más de 5 mil millones de pesos. Yo espero que esa conducta se mantenga”.
Narro instó, como lo ha hecho en días recientes, a estudiar con seriedad los alcances de la situación económica en México. “Es una crisis también de valores y de agotamiento de un modelo que no da más, que hay que repensar, replantear y en donde todos tenemos qué decir y qué aportar”, señaló.
“De verdad creo que no es un asunto simplemente de estado de ánimo”, añadió el rector, al ratificar su posición en la polémica nacional. “Es un asunto de responsabilidad, objetividad y realismo. La crisis existe, es muy delicada y por supuesto que nadie quiere que vivamos una catástrofe, pero el asunto es grave”.
El rector de la Universidad de La Habana, Rubén Zardoya, entregó a Narro la medalla conmemorativa de los 280 años de la institución cubana, en reconocimiento al nivel académico, compromiso social, pluralidad de conocimientos y actitud crítica y constructiva de la UNAM.
Las dos casas de estudios “tienen una larguísima tradición de intercambio que, además, por fortuna no se ha interrumpido en los últimos años”, recordó el rector mexicano.
Señaló que más de cien académicos cubanos trabajan en la UNAM, donde además hay 52 estudiantes originarios de la isla. Unas dos docenas de investigadores o docentes mexicanos están en Cuba, bajo diversos planes de intercambio que favorecen las estancias cortas.
Narro asistió la víspera a la inauguración de la 18 Feria Internacional del Libro y visitó el local de la UNAM.
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